Quilt abandonado/ Quilt terminado.... ¡Por fin!

Retomando la tarea
Ordenando las piezas
Listo para acolchar (la parte más difícil)
Terminada

En septiembre comencé a coser los cuadrados de lo que hoy ya es una colcha para Inés. Trabajé unas poca horas y abandoné los cuadrados listos por meses. Y por fin en el último mes aproveché que mi marido cuidaba de Inés para terminar mi trabajo.

Para ser mi primera colcha no está nada de mal. Aunque debo mejorar muchos detalles como el evitar las arrugas al quiltear y hacer más derecha la puntada de la orilla.

Poniéndome al día

Esta fue la primera Pascua de Resurrección en que Inés pudo jugar con sus huevitos de chocolate. Debo admitir que ella solo probó uno y que hemos sido sus padres los que hemos hecho que desaparezcan :P

En todo caso, a ella le encantó pasarlos de un lugar a otro. Para ella era como jugar con los porotos o garbanzos.

Aún estoy trabajando en este quilt para Andresito el hijo de David y Trini que nacerá en las próximas semanas. Ojalá tuviese más tiempo para coser, pues disfruto mucho con el patchwork. La parte del quilt (acolchado) es difícil para mí, pero igual de entretenida.

Inés, las obligaciones de la casa y mi tienda en línea me ocupan mucho tiempo.

El jueves terminé de tejer, rellenar y coser un duende que se vendió en mi tienda en línea. Pienso que lo vendo muy barato para el esfuerzo que hago tejiendo con un palillo tan delgado. Pero la gente no valora eso.

Ayer vino mi amiga Edith y le trajo este hermoso pantalón tejido con lana 100% de oveja a Inés.

Y hoy me tocó lanolizar cobertores de pañales. Esa es una de las tareas hogareñas que disfruto mucho.