La semana pasada comenzaron a pasar cada vez más seguido los aviones típicos de septiembre. Ellos pasan haciendo ejercicios de preparación para la parada militar del 19 de este mes.
Inés se ponía muy contenta cuando los veía volar. Salía al patio y cuando ya no se veían me decía "más", como si de mí dependiera la frecuencia de sus vuelos.
Este sábado vimos pasar otro avión. Uno más grande y con vuelo más bajo. Dispuesto a aterrizar en la base El bosque de la Fach. Ese avión venía con consuelo para cuatro familias. El consuelo de poder darle sepultura a sus muertos.
El accidente y muerte de 21 personas en el archipiélago de Juan Fernández nos tiene en duelo Nacional. Un duelo que nos debe hacer pensar en lo corta que es la vida y en que hay que aprovechar cada momento que ésta nos da.
Tienes toda la razón.
ResponderEliminarQue cosas!!!!.
ResponderEliminarA mi me dan terror los aviones y a Arnau también, cuando vamos en metro se cree que se va a caer y yo le digo que no es un avión , que este tren no es de los que se caen....